La última semana de Junio se rompió la albarrada 2 kilómetros hacia el norte de donde vivo, que es la parte baja para donde corre el Río, en un sector llamado la Majagua. Se inundaron municipios del Bajo Sinú y la cifra superó los 28 mil damnificados con agua casi hasta el techo, sin casas y con las pocas cosas que alcanzaron a reguardar a orilla de carretera en las partes más altas. Ahora siguen las epidemias.
Pero desde ayer empecé a escuchar el rumor de la creciente que viene, algunos dicen avalancha de lodo, pero lo cierto es que el Río sigue creciendo y desde hace una semana empezaron a ceder poco a poco las contenciones puestas en los puntos críticos, y acá en mi pueblo hay casas que el agua comenzó a resumir en los patios con chorros que fluyen y en otras entre las baldosas de las salas y las terrazas, el nivel del afluente supera el nivel del pueblo como por 2 metros y el agua sigue subiendo.
Después de escuchar la noticia me levanté de la cama y me encuentré con mi madre y mi padre asomados a la puerta que da a la calle.
“Tuor, asómate un momento y mira como la señora de la droguería de al frente está sellando las puertas hasta la mitad con bloques”. Efectivamente había un obrero sellando la puerta del negocio y la de la entrada principal a la casa, evitando que el agua llegue a entrarles en caso que suceda la tragedia vaticinada para el medio día de hoy.
La CVS, hombres del pueblo y el Ejército están trabajando en reforzar las albarradas, para evitar que el río arrastre con ellas o el nivel del mismo la supere, mientras tanto yo miro mi cuarto y me pregunto ¿en dónde voy a levantar mis cosas, todas mis posesiones son en madera, además de todo lo que tengo debajo de mi cama (revistas, periódicos, material de estudio de la Universidad y los regalos del matrimonio) no es suficiente con que levante la cama sobre bloques, como ya lo han hecho otros vecinos, sino donde voy a meter lo que no pueda levantar.
Pasó el medio día, el Río subió un poco, hay sectores en donde está a raz con la tierra, pero hasta la noche de hoy se mantiene en nivel. Se dice que la hora crítica es la del viernes al finalizar el día. Funcionarios de las entidades encargadas dijeron por las noticias locales que ya todo se les salió de las manos y que se ha hecho hasta donde se ha podido, todo ahora está en manos de la naturaleza y mientras tanto en el Nudo del Paramillo, donde nace el Sinú, no ha dejado de llover en un sólo nstante.
En algunas zonas los habitantes sacaron colchones y electrodomésticos hacia las zonas altas como la carretera que comunica a Montería con Coveñas.
Y zonas más bajas el agua sobrepasó la altura de la carretera.
6 comentarios:
bien aventurados sean los designios de eru para con tu pueblo.
en verdad espero que todo salga bien.
es una situacion muy alarmante. no esperes que las cosas te pasen para actuar, muda tus cosas a un sitio seguro yaa sea un pueblo cercano.
esto se puede apaciguar con el trabajo de todo el pueblo, que cada quien aporte su granito de arena en la situacion.
...tengo en anchos mares el placer de navegar....
S.O.S. x los damnificados de Córdoba.
go to my blog.
lully, Reflexiones al desnudo
Conmovedoras imágenes. Espero que no trascienda a peores. Esperemos que cese la lluvia y que este verano que tenemos por Medellín se extienda hasta tu linda región para beneficio de todos.
Un abrazo solidario y deseándote lo mejor y extensivo para toda la gente linda de tu región.
Pos muuucha suerte con el señor Sinú, Maese Tuor, esperamos que el majestuoso río no se sobrepase con la sabana.
hola! saludos, si puedes, a Paula Jimenez de Manizales, si es la que conoci y trate un tiempo por internet.. persona maravillosa. Por cierto, felicidades... y esta muy lindo tu blog.
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