Hoy (viernes 10) en la mañana fui a llevar a mi pequeña Aranel donde la abuela y a la bella Idril al transporte en el carro porque desde la noche anterior no había dejado de llover, tal como ha sucedido en Medellín; escucho el rumor entre la gente del pueblo de una boca que se había abierto en la zona de emergencia del invierno pasado. Tres horas más tarde el río estaba pasándose por encima del camellón a un kilómetro más abajo de donde yo vivo.
La tensión sigue en aumento, el río no deja de pasar agua constantemente, las campanas de la iglesia sonaron varias veces de forma no acostumbrada y la gente corre por las calles gritando “boca en el río” para que los hombres vayan a cargar costales y a echar tierra en el sitio en donde el camellón se debilita, para que el agua no se abra paso hacia las casas del pueblo.
El año pasado para la fecha de mi matrimonio estaba mi pueblo inundado junto a la gran mayoría de las poblaciones del bajo Sinú. Vino presidente, y tanto el ejército como la Corporación Autónoma de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS) se pusieron la camiseta (los primeros por ser quienes son y los segundos que aunque es su obligación. atender este tipo de emergencia y evitar que sucedan, me parece que como todos los entes públicos del departamento, sólo trabajan por presión del Presidente).
Después de trabajar sin descansar durante varias jornadas, colocaron costales llenos de tierra e hicieron un muro contendor con largas varetas. En el sector de La Majagua pudieron controlar la emergencia, pero el daño ya estaba hecho y los cultivos y las casas anegadas, o mejor dicho, inundadas. Acá donde yo vivo se pudo evitar una tragedia mucho más grande, puesto que acá está el mayor núcleo poblacional.
A todas luces había que reforzar las zonas afectadas cuando el río bajara de nivel. De lo que mandaron para los damnificados, muchos trabajadores de la alcaldía local, que parecen que no tuvieran trabajo, se apropiaron de alimentos, aceites y varias cosas que eran enviados para las familias que no tenían trabajo, estaban bajo agua al igual que los cultivos que le garantizarían el sostén económico futuro.
Pasó un año y cuatro meses y el río está en las mismas, y en la zona de la Majagua, en donde se hizo la boca el año pasado, se construyó en piedras una murallita dentro del terreno de las personas que se quedaron sin casa “por culpa del río y de la erosión”, dejándole espacio a la “gran serpiente de agua” para que echara más tierra en su interior. Estas fotos son de principio de semana en el sector de la Majagua, antes que el río subiera su cauce. Y esta es la obra que hizo la CVS en el lugar.
En donde yo vivo, Carrillo (Ondolindë para mi) estas obras debieron hacerse también, pero se desconoce que sucedió nunca se realizaron. Algunos culpan al dueño del terreno otros dicen que la CVS no daba la plata correspondiente… nada se sabe lo único cierto es que el río tiene corriendo a la gente otra vez.
Estas son las fotos tomadas el jueves en la tarde cuando empezó a subir el nivel del agua.
4 comentarios:
Esa platica se perdió, la cvs tuvo que pagar antes algunas cirugías estéticas... ya sabes como es.
No sabía que la emergencia estaba por repetirse, y tendrá que pasar a mayores para recibir ayuda, como todo en este país.
Un Clamoroso saludo Tuor, hijo del viento. am.
Por cierto, bellas fotos... Carrillo debería sentirse orgulloso de haber parido un exponente como tu.
abrazos, Namarië.
con todo lo que ha pasado con el rio, existe todavia aquel caminito hobbit?
lo que ves e lo que hay. Precisamente voy a armar un post gráfico sobre ese antiguo lugar de reflexión.
Gracias Fausto... hay cosas que aún debemos aprender de los habitantes de la caiudad de las luces. Namárië
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